Los imperios que han existido en el mundo que conocemos, lograron su éxito en desarrollar las mejores estrategias de guerra y las alianzas obtenidas por soborno para apoderarse de los jugosos botines y subyugar al enemigo para tributar a su conquistador.
Parece ser que hoy, los imperialistas han perdido terreno de acción a sus métodos sanguinarios de obtener riquezas; gracias al reconocimiento de los derechos humanos; este tipo de práctica es conocida como genocidio y únicamente manipulan al pueblo con sobornos y así comprar voluntades a un pueblo vulnerable por la miseria interna que ahoga su integridad, vendiéndose al mejor postor y otros esperando que aparezca su mesías para que resuelva sus problemas y terminan escogiendo a barrabas y una elite anhelan al súper hombre con un coeficiente altísimo y apariencia de piedad, entonces dirán paz y seguridad y será lo que tiene que ser. El que tenga oídos que oiga; continuemos con el tema.
El amor al poder, ha provocado que el hombre no escatime nada y pierda su instinto filantrópico, acción humana natural que nos distingue de los animales irracionales, aunque estos no se ponen en peligro de extinción por cuenta propia, sino que es consecuencia del ser humano. El hombre será que ha evolucionado o involucionado?
Las amenazas actuales están en derredor de solamente oprimir un botón y con ello dañar a todo ser vivo, incluyendo la vegetación en varios kilómetros a la redonda, que ironía, cuando el hombre a alcanzado un alto grado de conocimiento y que se ha distanciado enormemente del hombre de las cavernas, hoy busca destruirse a si mismo; nos detendremos en un pequeño tumor que se esta extendiendo en el cuerpo social, el SOBORNO.
La doctrina del presente siglo es >> tranza y avanza << Este dogma es aplicado en casa, en el trabajo, en la escuela, la universidad, los gobiernos, la política, la economía, etc. etc. Entiéndase como doctrina a una forma de vida y la elevo al grado de dogma, porque es tan común en el diario vivir, que no puede faltar en una actividad humana.
Un día sábado. la energía se fue en casa de una prima, provocada por un corto circuito en la cometida (conexión del poste de luz al contador) y se apresuro para buscarle solución inmediata, para su decepción no le solucionaron su problema, hasta el grado de contratar un electricista el día martes y cuando éste estaba realizando el trabajo, apareció un trabajador de la empresa eléctrica y les dijo que debían tener un permiso para realizar cualquier trabajo, pero que no lo reportaría. El esposo de mi prima se le acerco y le dio 50 quetzales, ella estaba molesta porque ese dinero era de ella y no del esposo
Por qué le dio dinero? Juzgue usted. Les comparto una acción en casa y que diremos de las que se dan en el trabajo y las que se dan a gran escala en el congreso, con la ejecución de los proyectos subastados en la repartición de las comisiones a los diputados. La tranza tiene su fuerza en el soborno.
Isa 1:23-26 Tus gobernantes son rebeldes y amigos de los delincuentes. Todos ellos desean sobornos y quieren regalos. Ninguno defiende los derechos de los huérfanos ni la causa de las viudas. Por eso el Señor Dios Todopoderoso se expresa así: «¡Ah! Me vengaré de mis enemigos y así me desquitaré de mis adversarios. Luego te voy a agarrar, te fundiré con potasa para quitar tu escoria y limpiaré así tus impurezas. Traeré de nuevo a ti jueces como los de antes, y consejeros como los que tenías al principio. Otra vez volverán a llamarte Ciudad fiel, Ciudad de justicia».
Estas prácticas se remontan desde tiempos antiguos y vemos como Dios los censuraba y les ponía fin a su conducta y sin duda alguna, hoy no será la excepción. Para participar en las arenas políticas y avanzar en una gestión gubernamental, o cualquier tipo de transacción privada o publica, no es necesario ningún tipo de tranza. Como todo comienza en casa, éste es mi consejo:
Prov. 15:27 El que tiene ganancias injustas perturba su casa, pero el que aborrece el soborno vivirá.
En nosotros está el que nuestra casa haya paz y no perturbación y vivamos largos días. Bendiciones.-
Interesante tema, en realidad todo empieza en casa, desde niños estamos buscando "excusas" y luego "mentimos" para encontrar soluciones, pero observen la cadena...un pecado atrae otro...terminando en "tranzas" muchas veces como soluciones.
ResponderEliminarDebemos inculcar en nuestros hijos a decir siempre la verdad, que puedan experimentar desde pequeños esa satisfacción interna de realizar obras buenas a través de un simple "acto" de voluntad con enfoque positivo.
Si fortalecemos esa área en ellos, crecerán aborreciendo las "tranzas". Hoy en día da tristeza el soborno que se manifiesta en todo nuestro alrededor, estamos invadidos en colegios, universidades, trabajos, "política", etc.
Al inicio el soborno aparentemente no hace daño, pero todo sale a luz y es entonces donde daña la dignidad humana, la confianza, el respeto, etc., preguntémonos entonces...vale la pena pertenecer a este grupo de "leprosos del alma"?...no sería mejor poder llevar la frente en alto, viviendo con una paz interior por haber hecho lo correcto?....es fácil decirlo y escribirlo...pero difícil vivirlo.
Huyamos pues de esta carroña humana que corrompe cada día nuestra sociedad!!!!
Un buen día, alguien nos regaló un pedazo de tierra para habitarla y recorrerla. Más tarde, ellos la llenaron de aduanas.
ResponderEliminarEn un principio, teníamos un cafetal que daba para repartir. Después ellos le pusieron cercos, alambres, carteles de prohibición, marca, logo, apellidos de los dueños y una relación de precios de todos sus productos.
En el principio de los tiempos, aquellos que lo deseábamos cambiábamos de hogar con libertad, como multitudes nómadas, aprendiendo de otras gentes y otros lugares. Pero a ellos les molestó nuestro excesivo movimiento sin control. Inventaron la xenofobia.
Primero, existía un gran tablón donde cada uno escribía su opinión y sus pensamientos para que todos los conocieran. Después ellos se lo adueñaron, cobraron por palabra, injertaron publicidad, censuraron ideas inapropiadas y quemaron todo tablón autónomo.
Antes, uno nacía, y eso era todo. Ahora, cada palmo de suelo tiene uno u otro nombre, y dependiendo de su puntería el neonato obtiene una nación, un gentilicio, e información completa sobre a quién debe obedecer -y, por el mismo precio, a quién debe odiar-.
Al inicio, cada persona era el mayor exponente de una cultura distinta. Más tarde, ellos unificaron las tradiciones para evitar una excesiva memorización de peculiaridades.
Antes, si el líder se corrompía, bastaba con matarlo o expulsarlo. Ahora el líder no es humano: está repartido en las moles inamovibles de grandes multinacionales, corporaciones, empresas informativas, gobiernos... donde sólo asoman cabezas de turco. Al ser arrancada una, surgen veinte en su lugar.
Al principio, todos éramos inconformes. Pero llegaron ellos, y encendieron una televisión ante nuestras narices.
Mi amigo Gil Zu esto más que soborno es expropiación de nuestro patrimonio, aunque muchos cedieron sus derechos por una regalía o falsa promesa y otros amenazados. Lo terrible es de que hicieron uso de la ley, por eso insisto que hecha la ley hecha la trampa. Hoy el 90% de las buenas tierras están en manos del 2% de la población, espero que este conato de guerra fría no se caliente porque en tiempo de guerra todo se vale porque si estamos viviendo tiempos de paz y de una seudo-democracia en donde todo se vale no digamos en tiempo de guerra. Que Dios tenga misericordia de nuestra nación.
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