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Atiende el consejo |
Recuerdo aquellas hermosas y
edificantes conversaciones que teníamos mi viejo y yo, nunca faltaban los
refranes, eran el plato de entrada. Algunos ya me los sabía de memoria, pero lo
extraño era que cada vez que los usaba era para contar una experiencia
diferente, dicho evento me hacía comprender de mejor manera el aforismo o dicho
de otra manera, “el proverbio”. —«El
entendido a señas y el necio a puro garrote»—, dijo mi viejo. Después de unos segundos de
silencio, continuó diciendo: —No
entiendo por qué tu hermano no deja de beber—. En esa ocasión me contó como el alcohol se
apoderó de él, al extremo de mantenerlo amarrado, porque procuraba irse a lanzarse al mar en su locura, hasta que enfermó de gravedad y tuvo que ser llevado de
emergencia a la capital, y estando allí, el doctor le dijo: —Alfredo, de continuar así, usted morirá, así
que le daré un consejo— no lo
haga—.
Eso era lo que mi viejo no entendía, pues él después de recibir el consejo, decidió
no volver a beber más, y mi hermano recibía multitud de consejos y no dejaba de
hacerlo. Mi viejo sabía la respuesta,
cuando pronunciaba el refrán del entendido
y el necio, sólo que se negaba a
aceptar que mi hermano tuviera que pasar experiencias lamentables, cuando podía
ser entendido.
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Podemos cambiar |
¿Por qué hay personas que
fácilmente dejan de hacer algo que saben que es malo? Pero también hay otras
que se demoran un poco más y a estas les siguen un buen grupo que pasan años
intentándolo y no lo logran. Sí lo
logran, pero a un precio muy alto. En la
tierra de Palestina, en un pueblo muy particular, llamado Israel, se realizaban
tres principales días festivos: la Pascua, Pentecostés y la fiesta de los
Tabernáculos. Una de estas dedicada a las ceremonias del templo, incluyendo
diferente producto de la cosecha: cebada,
trigo y uvas. Los primeros dos eran granos, el último es fruta. Estos eran festivales de la cosecha (o de la
vendimia en el caso de la uva) los cuales se celebraban tres veces al año,
cuando todo varón debía acudir ante la presencia (“rostro”) de Dios. Estos tres
festivales tenía un significado profético, relativo a la "cosecha de
almas", en donde en el divino mandato requiere que los hombres estén
presentes ante Dios. ¿Qué tiene que ver esto con la conducta del ser humano? ¡Bien!
Trataré de exponerles mi punto de vista, dándoles a conocer la particularidad
de cada producto de la cosecha y forma de convertirlo en útil para el consumo, ¡claro!
Apoyado de información muy valiosa del Dr. Stephen Jones.
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La cosecha |
Dios cosecha Su cebada, su
trigo y sus uvas, en diferentes formas, tal como nos lo enseña la naturaleza. Los residuos de la cebada se sacan y se botan
con facilidad al cribarla, y así, se dice que la cebada es aventada. La acción del viento por sí solo es suficiente
para quitar la cáscara (o el desperdicio de la limpia). Lo que nos habla aquí es del grupo de la
cebada, que con prontitud responde ante el viento (Espíritu Santo). Para
remover la cáscara y demás basura del trigo, se requiere Trillarlo, es pasarle
encima un cilindro pesado, o algo parecido, para desprender el grano de la
paja. Es un método de acción más
rigurosa o más pesada, pero así, resulta efectivo el trabajo de limpieza. Nos describe el hecho de que la iglesia ha de
ser "cosechada" por medio del juicio, o sea, la tribulación. En latín "TRIBULUM" es un instrumento para trillar (o sea, separar el
grano de la paja, o cáscara.) Finalmente, para obtener el jugo de las uvas,
éstas tienen que ser trituradas con los pies o pisoteadas. Las uvas no tienen que ser cribadas (o
limpiada a través de una zaranda), pero por tener "pulpa", tienen que
ser comprimidas o machacadas con fuerte presión, para poder obtener el vino,
que representa o simboliza la forma más severa de juicio aplicado a los no
creyentes. Efectivamente, el hecho
simbólico es que Dios, por Sí mismo, obtiene el vino para Su mesa de comunión
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Limpiando el trigo |
Un día me levanté con gran
preocupación por mi hermana y decidí mandarle un mensaje así: _Chely, no para
siempre será trillado el trigo,_ y es que sabía de sus luchas. Años después me
aconteció algo sumamente desastroso a mi juicio, de pronto quedé con paraplejia
en mis piernas y mi brazo izquierdo. Sin
el control de mis esfínteres, era vergonzoso no saber cuándo se debía evacuar los
desechos de mi cuerpo, también me dolía el comprender que alguien fuera capaz
de desear mi muerte. Comparaba con la puñalada que una persona me incrustara
nueve meses atrás, situación que me hizo renunciar a un trabajo que amaba
tanto, pero esto no lo podía asimilar, y a unas semanas de estar en el
hospital, alguien llegó a decirme que yo había sido pedido para zarandearme. Me quedé sin palabras, ¿cómo era posible que
un ser tan despreciable, se le estaba considerando un grano de trigo? Además en
la Biblia se menciona que Pedro fue pedido para zarandearlo y quién es Pedro. “No para siempre será trillado
el trigo”. Aquí no se menciona que habrá
destrucción para el trigo. “Cuyo aventador está en su mano, y limpiará
completamente su era, y recogerá su trigo
en el granero; mas quemará la paja
con fuego inextinguible”. Wow, wow, wow!!! ¿Qué clase de fuego es éste? En
el versículo anterior en Mateo 3:11 dice claramente que es el Bautismo de
Espíritu Santo y fuego. Este Dios parece ser que si es AMOR y fuego consumidor ¡Aleluya!

Ahora creo que es más fácil
entender lo de la tribulación y gran
tribulación, lo que significa machacar y pisotear la uva para extraer su jugo. Dios no desperdicia nada, pues cuando alimentó
Jesús a los cinco mil, hizo que sus discípulos recogieran lo que sobró y se
llenaron 12 canastos, ¡ups! ¿Doce? Esto, si Dios me lo permite lo trataré en
otro tema. Quiero finalizar diciéndote que estar en manos del Agricultor por
excelencia, la aniquilación no estará en tu vida. Vemos la vida y la muerte desde una
perspectiva humana y por eso no logramos entender muchas veces los acontecimientos
a nivel personal y mundial; de ver tanta desgracia, desigualdad, pobreza e
injusticia. Dios no puede ser burlado,
todo lo que el hombre siembre, eso segará. Dios segará, lo que sembró. ¿Eres tú
semilla? Ten cuidado de la noche, porque allí es donde el maligno introduce su
semilla, y querer arrancar la cizaña se corre el riesgo de arrancar el trigo,
por lo que habrá que esperar a que el trigo esté listo para ser cortado y
entonces se hace la separación (muerte). Resiste, porque el que ha de venir, vendrá y no
tardará.
Si
alguno edifica sobre este fundamento, oro, plata, piedras preciosas, madera,
heno, rastrojo; la obra de cada cual será puesta de manifiesto; porque el día
la declarará, pues que en fuego es revelado; y el fuego mismo probará la obra
de cada cual, qué tal sea. Si la obra que alguno ha edificado sobre él,
resistiere, recibirá galardón: si la obra de alguno fuere consumida, él llevará
el daño; pero él mismo será salvado, si bien como quien pasa por medio del fuego.
Que buena reflexión y relación con las cosechas. Nuevamente gracias por tu publicación y esmero. Saludos cordiales Maynor Estuardo Chavez Cooper
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